1 Pedro 4:7 “Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración. Y, ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá multitud de pecados.”
En medio de la noche oscura vuelve a sonar la diana que nos invita a despertar del sueño. A través de estas palabras cargadas por la urgencia de un tiempo que parece haberse acabado, el apóstol Pedro nos exhorta a vivir una vida sobria, a velar en la oración, y sobre todo a expresar el ferviente amor, derramado en nuestros corazones, por todos los santos para resplandecer en medio de esta generación y apresurar la retorno de nuestro Rey.