Mensajes por “Álvaro Astete”

Ganar a Cristo (Parte III)

Una palabra para jóvenes que se encuentran en condición de noviazgo y para los que deseen entrar en este tipo de relación.
Filipenses 3:8-11.

Ver mensaje

Ganar a Cristo (Parte II)

Conocer al Señor y padecer por su causa son dos asuntos que deben ocuparnos la vida entera.
Filipenses 3:8-11.

Ver mensaje

Ganar a Cristo (Parte I)

Ser hallado en Cristo debe ser una de las mayores ambiciones en la vida. Esa pregunta formulada por Dios en Génesis al primer hombre:”¿Dónde estas tú?”, busca todavía una respuesta de nuestra parte.
Filipenses 3:8-11.

Ver mensaje

Subiendo a Betel

Un llamado de Dios a las familias, en especial a los jefes de hogar, a salir del letargo y a actuar ordenando sus hogares, conduciéndolos hacia Betel, la Casa de Dios.
Génesis 28; 33:18-20; 34:30; 35:1-4. Hebreos 3:6.

Ver mensaje

Visión y conocimiento

El conocimiento debe estar gobernado por la visión celestial, de lo contrario este se volverá vano y no ayudará a la edificación. Tal como lo apreciamos en la vida del apóstol Pablo, quien se consideraba prisionero de esta visión celestial: Cristo.
Efesios 3:1; 4:1

Ver mensaje

Proyecto de vida (Parte II)

La vida de Eliseo es un claro ejemplo de un hombre que superpuso todo a la visión y vocación que había recibido. ¿Qué haremos nosotros? El Señor Jesucristo nos ofrece un proyecto de vida donde uno de los objetivos es ser hallado en él, conocer el poder de su resurrección y participar de sus padecimientos.
Filipenses 3:8-11, 1 Reyes 19:19-21

Ver mensaje

Proyecto de vida (Parte I)

El Señor Jesucristo nos ofrece un proyecto de vida donde uno de los objetivos es ser hallado en él, conocer el poder de su resurrección y participar de sus padecimientos. Sin duda, es un alto proyecto, una alta vocación o llamado que nos realiza el mismo Dios. Tenemos que responder a esta vocación, a este proyecto de vida que el Espíritu Santo ha diseñado para nosotros.
Filipenses 3:8-11.

Ver mensaje

Arrepentimiento y perdón

Cuando nosotros somos los que hemos ofendido a un hermano debemos arrepentirnos con toda sinceridad, de corazón. Los arrepentimientos por cumplir con lo establecido, en muchas ocasiones suelen ser fingidos y no tienen un real efecto en la vida de quien quiere ser perdonado. El único arrepentimiento que provoca cambios significativos es aquel que es provocado por el Espíritu Santo ya sea por medio de su palabra o de su providencia. Sobre este asunto del arrepentimiento, perdón y la restauración posterior queremos hablar algunas cosas preliminares.
S. Mateo 5:24, 2 Crónicas 33:12-13

Ver mensaje

Perdonándonos unos a otros

Uno de los principios espirituales para poder vivir de manera plena la comunión con Dios y nuestros hermanos es el perdón. Tener consciencia del perdón otorgado por Dios es la base para que también practiquemos el perdón los unos a los otros.
Isaías 59:2, 2 Crónicas 7:14, Mateo 6:12-15

Ver mensaje

La Trinidad – Estudio 3.2 – La encarnación del Hijo

Objetivo: Analizar el nacimiento de Jesús en relación a sus aspectos históricos y proféticos.

Ver mensaje